El 07 de octubre de 2023, las brigadas Al-Qassam del grupo Hamás llevaron a cabo una ofensiva en contra de Israel, enmarcada en la operación “Inundación de Al Aqsa”. Este ataque sorpresa fue ejecutado por tierra, aire y mar, junto con el fuego masivo de cohetería, con a lo menos 3.000 proyectiles desde la Franja de Gaza y alcanzando incluso a las ciudades de Tel Aviv y Jerusalén. Dicha acción fue llevada a cabo por las fuerzas especiales Nakba, comandos navales, un aparato subterráneo y otro de cohetería, además de un ala aérea de Hamás, dando como resultado más de 1.200 muertos y 251 rehenes israelíes (Izso & Alkhshali, 2024). Como respuesta de la Fuerza de Defensa de Israel (FDI) se originó la operación “Espadas de Hierro”, cuyo objetivo inicial buscaba neutralizar a las brigadas Al Qassam que ingresaron a territorio israelí, controlar el perímetro de la Franja de Gaza, y eliminar a Hamás (CEEAG, 2023).
Gráfica N°1: Fases de la Respuesta de Israel: Operación “Espadas de Hierro”
Fuente: CEEAG con información obtenida desde FDI, (2024)
Actualmente las FDI mantienen esfuerzos aún en la Franja de Gaza, dentro de la 3era fase de la operación. Sin embargo, simultáneamente se han mantenido ataques en contra de Israel desde el Líbano, por parte de Hezbolá, y desde Cisjordania, donde grupos que apoyan la causa Palestina, como Fatah y la Yihad Islámica Palestina (YIP) entre otros, han mantenido acciones irregulares permanentes en dicha zona. De dichos frentes el que ha cobrado mayor relevancia durante el último tiempo es el del Líbano, ya que Hezbolá ha acrecentado las operaciones que el 08 de octubre de 2023 iniciaban con fuegos de morteros y misiles antitanques.
Lo anterior da cuenta de que el conflicto no tan solo enfrenta a Israel y Hamás, sino que ha sumado a los movimientos palestinos mencionados anteriormente, en contacto con territorio israelí, así como también a otros en contacto indirecto, como son los Hutíes de Yemen y el régimen sirio, entre otros, enmarcados en el “Eje de la Resistencia”, liderado por Irán.
Así, la expansión geográfica del conflicto ha generado para Israel tres frentes activos en contacto con su territorio: (1) hacia la Franja de Gaza, en contra de Hamás; (2) hacia la frontera con el Líbano, en contra de Hezbolá; (3) y finalmente, en el territorio de Cisjordania, en contra de grupos como Fatah y la YIP. A la vez que mantiene la contraposición indirecta de los actores del “Eje de la Resistencia”, siendo Irán y los Hutíes quienes han alcanzado territorio de Israel con ataques de misiles y drones.
Toda esta situación ha generado que la comunidad internacional mantenga su mirada hacia el Oriente Próximo, generando esfuerzos para evitar que el conflicto inicial entre Israel y Hamás no se expanda a nivel regional, situación que a la fecha no se ha logrado contener totalmente. El presente informe de observatorio aborda de qué forma lo que inicia como una guerra entre Israel y Hamás, ha adquirido ribetes entre Israel y múltiples actores del “Eje de la Resistencia”.
La escalada en la frontera norte y el posible giro de la guerra hacia el Líbano
Desde el 8 de octubre del año pasado, la situación fronteriza de Israel y el Líbano (Hezbolá) se ha deteriorado paulatinamente. Durante el mes de julio de 2024 los ataques mutuos se han incrementado y existen indicativos que hacen suponer que el esfuerzo principal de las FDI tornaría hacia dicha zona, a la vez que se mantiene la posición interior respecto de los tres frentes enunciados precedentemente (ver Imagen N°1). Sin embargo, esto no sólo significa un cambio de frente para las FDI, sino que también en los modos de llevar a cabo las operaciones militares, dado que Hezbolá presenta condiciones y desafíos diferentes a los de Hamás.
Este grupo miliciano libanés no se encuentra circunscrito a un territorio cercado y controlado por todos sus flancos, como es la Franja de Gaza, sino que cuenta con opciones para maniobrar en un terreno de mayor amplitud y con flexibilidad de fronteras con Siria, quienes igualmente se oponen a Israel, situación que les serviría para salir con un esfuerzo convergente de multi frente.
Asimismo, Hezbolá cuenta con fuerzas superiores numéricamente a las de las brigadas Al-Qassam, operando como una guerrilla y que han demostrado en sus ataques con cohetes como el Katyusha y Burkan; los misiles anti-tanque como el Kornet tener gran efectividad contra vehículos blindados y posiciones israelíes. Lo anterior complementado con fusiles de asalto, ametralladoras y aparatos explosivos improvisados (IED por su sigla en inglés) que sirven para realizar ataques sorpresa y emboscadas (Jones, Byman, Palmer, & McCabe, 2024; Mroue, 2024).
Dentro de las acciones que se han dado entre las FDI y Hezbolá, destaca el ejecutado por estos últimos hacia territorio israelí el 3 de julio del presente, como respuesta por la muerte del comandante de la unidad “Aziz”, Mohammad Nimah Nasser, en la ciudad de Tiro (sur del Líbano). Esta contraofensiva contempló el lanzamiento de 200 cohetes Katyusha, 20 drones militares y 20 misiles antitanques, cuyo objetivo eran los 14 cuarteles generales de la ocupación israelí en Galilea y el Golán (Infobae, 2024). Cabe destacar que 100 cohetes se dirigieron hacia el Cuartel General de la División del Golán en la base de Nafah y decenas hacia la base de Kela, al igual que en el ataque de marzo de este año (CEEAG, 2024).
Frente a este escenario, Israel ha mantenido un ritmo sostenido de ataques en la frontera con Líbano, aumentando su frecuencia en las zonas próximas a la Blue Line, tal como ocurrió el día 6 de julio con el ataque a la localidad de Odaisseh y en Houla, ambas al sur del territorio libanés y hacia puntos de observación de la ONU (Chehayeb, 2024), dejando patente la violación de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU[1] y el escenario volátil en la región.
Israel ha mantenido ataques aéreos de precisión – con sus cazas F-16 y F-35 – y operaciones terrestres limitadas hacia el sur del Líbano, buscando destruir el mando y control, infraestructura y posiciones de lanzamiento de cohetes de corto alcance de Hezbolá. Un ejemplo de esto queda en evidencia en las acciones de las FDI del 9 de julio recién pasado hacia territorio libanés, los que estaban dirigidos a instalaciones de almacenamiento de Hezbolá en Kfarkela[2]. Al día siguiente, la milicia libanesa respondió con fuego a esta incursión, lanzando 40 cohetes desde Qabrikha (área sur del Líbano) hacia los Altos del Golán.
El acrecentamiento de las tensiones entre las partes ha generado la movilización de tropas adicionales de las FDI y el robustecimiento de su sistema defensivo en su frontera norte. En marzo recién pasado, se creó la brigada “HeHarim” (“Las Montañas”) para ser destinada hacia dicha área, la cual a inicios del mes de julio se desplegó hacia la frontera sirio-libanesa en reemplazo de la brigada 810 “Hermón”, bajo el mando de la 210 división “Bashan”, con el objetivo de defender las zonas del Monte Hermón y el Monte Dov. Por su parte, Hezbolá ha reforzado sus posiciones defensivas al sur de su territorio y ha intensificado sus campañas de propaganda en los medios de comunicación masivos tanto nacionales como por redes sociales para mantener la moral y voluntad en alto y quebrantar la de su amenaza.
Imagen N°1: Mapa de ataques a Israel desde el Líbano, el 22 de julio de 2024
Fuente: Institute for the Study of War – ISW (2024)
Como queda de manifiesto, la secuencia de acciones y reacciones de Israel y Hezbolá se han centrado en la zona fronteriza entre ambos beligerantes, expandiéndose en menor medida hacia territorios ocupados por Israel y que están siendo reclamados por Siria y Líbano en lo que respecta a las Granjas de Sheeba y los Altos del Golán. Esto podría generar una nueva expansión del frente hacia dichas zonas, por sus implicancias geopolíticas, su simbolismo y la ventaja operacional que representarían para los actores intervinientes (ver Imagen N° 2).
Imagen N°2: Zona de fricción de las Granjas de Sheeba y los Altos del Golán.
Fuente: El Orden Mundial (2024)
Las Granjas de Sheeba comprenden un espacio de 22 km2 ubicado al sureste del Líbano y al norte de los Altos del Golán, zona que es disputada por ambas partes. El Líbano y Siria reconocen esta franja como territorio libanés, en contraposición con la postura de Israel, mientras que las Naciones Unidas mantienen han mantenido presencia histórica para evitar la confrontación y el posible recrudecimiento del conflicto. Sin contar con una gran extensión, presenta un gran simbolismo y una ventaja operacional que han sustentado las intervenciones militares. Este sector representa la resistencia de Hezbolá ante la ocupación israelí, por lo que atacar o controlarlo fortalecería su imagen como defensor de la soberanía libanesa y su rol en la lucha contra Israel en Oriente Próximo, utilizándose para acrecentar el apoyo interno y regional, lo cual daría legitimidad a la postura de Hezbolá como fuerza política y militar en la región. La ventaja militar de esta área se relaciona con que su geografía montañosa ofrece ventajas defensivas y de control de zona, por lo que permitiría desplegar una defensiva robusta y ejecutar incursiones desde ella.
Por su parte, los Altos del Golán es símbolo de la ocupación israelí para Siria y Hezbolá, por lo tanto, su reivindicación es simbólica, siendo un factor de cohesión para los países del mundo árabe. Esta zona geográfica también presenta una ventaja estratégica, en cuanto al control que ofrece una posición dominante sobre los territorios que la circundan, entre los cuales se destaca fundamentalmente la presencia de cuencas hidrográficas que habilitan la región del Golán, como una zona propicia para la agricultura y la ganadería, destacando el trasado longitudinal del río Jordán y hasta el mar de Galilea.
Implicancias de la apertura de un nuevo frente en la frontera Israel y Líbano
El entorno estratégico se ha ido modificando para Israel respecto de lo que se inició el 7 de octubre de 2023. Efectivamente lo que se visualizaba como la guerra entre Israel y Hamás, se expandió rápidamente a un conflicto en contra del “Eje de la Resistencia”. A raíz del recrudecimiento de las hostilidades entre Hezbolá e Israel en la frontera norte de este último país, las FDI han generado acciones de configuración del teatro de operaciones, aumentando la fuerza desplegada, acrecentando el ritmo de las operaciones aéreas e incluso se reconoció la aprobación de un plan de ataque hacia el Líbano para enfrentar a Hezbolá (Europapress, 2024). Sin embargo, cambiar el esfuerzo principal hacia este nuevo frente, tiene implicancias de diversa índole para los beligerantes.
Para el Líbano – como Estado – esta situación podría tener repercusiones que agraven la crisis interna que atraviesa, a raíz de la situación económica y política actual. La activación de acciones bélicas que afecten el territorio y población libanesa podría generar que se apresure un posible colapso y que, por ende, Hezbolá busque aumentar su ámbito de control e influencia en el gobierno libanés.
Por otra parte, la generación de operaciones militares de guerra a lo largo de las zonas fronterizas entre ambos países podría provocar el desplazamiento de civiles y aumentar el número de refugiados al interior del Líbano, que ya había crecido desde la guerra civil en Siria (2011) – 1,5 millones de sirios (la mitad refugiados registrados por ACNUR) en un país de 4 millones de habitantes aproximadamente (Padinger, 2024) – lo cual sumaría más presión al gobierno de dicho Estado.
La contraparte israelí también sufriría efectos a raíz de lo anterior, en cuanto a que se acreciente la cantidad de población de los Kibutz en contacto con la frontera norte del país que deban abandonar sus zonas de habitabilidad, profundizando el problema que ya vive el primer ministro Netanyahu en la actualidad y que se inició con los ataques de Hezbolá sobre territorio del norte de Israel desde octubre de 2023, en cuanto al desplazamiento de israelíes hacia el sur, dados los constantes bombardeos de Hezbolá.
Por tanto, se aprecian diversas situaciones que traen a la memoria el episodio de la Guerra del Líbano de 2006, donde lo que inició con una escaramuza de Hezbolá y la muerte de dos soldados israelíes, se extendió a operaciones aéreas de las FDI y la respuesta del grupo yihadista con miles de cohetes, dejando un saldo de unos 1200 libaneses y unos 160 militares israelíes fallecidos. Esta instancia finalizó luego de un mes de enfrentamientos entre los beligerantes, dada la reolución de Naciones Unidas, que dispuso un alto al fuego, cuando ninguna de las dos partes había obtenido una victoria militar.
Conclusiones
El ataque perpetrado por Hamás el 7 de octubre del año pasado, generó una serie de repercusiones políticas y militares en la región, expandiéndose la conflagración de lo que todos llamaban la guerra de Israel y Hamás a un conflicto que involucró al “Eje de la Resistencia” cada vez con mayor potencia. Esta situación en particular se ha visto reflejada en la profundización de los enfrentamientos entre Israel y Hezbolá, lo cual obligaría a las FDI a modificar el esfuerzo principal de la guerra desde el frente de la Franja de Gaza hacia el norte en contacto con el Líbano, pudiendo incluso expandirse hasta la frontera con Siria.
Las Granjas de Sheeba y los Altos del Golán representan intereses contrapuestos entre Israel y los de Hezbolá y el régimen sirio. Estas zonas encarnan objetivos simbólicos y también de interés geoestratégico que podrían arrastrar a un enfrentamiento en dichas zonas, como una extensión de las diferencias históricas entre los países del mundo árabe con el Estado israelí.
De iniciarse una operación militar terrestre desde Israel en contra de Hezbolá, se estima que las FDI enfrentarán grandes desafíos, muy superiores incluso a los que hoy han vivido en la Franja de Gaza. Militarmente Hezbolá es una estructura de mayor poder de combate, mientras que la configuración del ambiente operacional los beneficia al contar con una situación geográfica de mayor ventaja que la que poseen las brigadas Al-Qassam en la actualidad.
En el caso de generarse el cambio de frente y el involucramiento militar de Israel hacia el Líbano, se estima que continuarán las acciones ofensivas con fuegos indirectos por parte de los Hutíes de Yemen, Hamás y otros grupos afines, mientras que el régimen sirio podría involucrarse incluso por vía terrestre e Irán proporcionaría recursos y otros tipos de apoyos.
Será clave en el futuro cercano apreciar el apoyo que EE.UU. y el Reino Unido brindan a Tel Aviv, sobre todo cuando el país norteamericano enfrentará elecciones presidenciales que pueden dictaminar la escalada o distención de la crisis actual del Medio Oriente.
Bajo el principio de la guerra de “economía de las fuerzas y reunión de los medios” se espera que, para ejecutar un cambio de frente, se genere una disminución del esfuerzo que se ha sostenido en la Franja de Gaza durante los últimos meses, a fin de concentrar el poder de combate hacia el norte. En el entretanto, se estima que continuarán las operaciones aéreas en búsqueda de configurar el teatro de operaciones, mediante la afectación al sistema de mando y control, instalaciones militares y depósitos de armas, entre otros de Hezbolá. En el intertanto se reorganizará la fuerza terrestre y las relaciones de mando que recaerían sobre el Comando Norte de las FDI, mientras que se continúa con el alistamiento del personal, que incluso ha llevado al Estado de Israel a resolver la modificación de la ley de reclutamiento militar, buscando que la población judía ultraortodoxa forme parte de la fuerza para los desafíos futuros que enfrentarán.
Referencias
CEEAG. (08 de marzo de 2024). Israel bombardea “en lo profundo” del territorio libanés. Obtenido de Centro de Estudios Estratégicos de la Academia de Guerra – CEEAG: https://www.ceeag.cl/wp-content/uploads/2024/03/IO-ISRAEL-BOMBARDEA-HEZBOLLAH.pdf
CEEAG. (25 de abril de 2024). Informes de Observatorio. Obtenido de Centro de Estudios Estratégicos de la Academia de Guerra – CEEAG: https://www.ceeag.cl/?p=1910
CEEAG. (29 de octubre de 2023). Informes de Observatorio. Obtenido de Centro de Estudios Estratégicos de la Academia de Guerra: https://www.ceeag.cl/wp-content/uploads/2023/10/IO-UPDATE-Israel-Gaza.pdf
Chehayeb, K. (06 de julio de 2024). Hezbollah fires over 200 rockets into Israel after killing of senior commander . Obtenido de ABC News: https://abcnews.go.com/International/wireStory/hezbollah-fires-200-rockets-israel-after-killing-senior-111668355
de Vega, L. (28 de octubre de 2023). Los desafíos de la batalla urbana en Gaza: túneles, rehenes, edificios altos y víctimas civiles. Obtenido de Diario El País: https://elpais.com/internacional/2023-10-28/los-desafios-de-la-batalla-urbana-en-gaza-tuneles-rehenes-edificios-altos-y-victimas-civiles.html
- (30 de enero de 2024). Ejército de Israel admite estar inundando túneles en Gaza . Obtenido de Deutsche Welle – DW: https://amp.dw.com/es/ej%C3%A9rcito-de-israel-admite-estar-inundando-t%C3%BAneles-en-gaza/a-68127020
El País. (11 de julio de 2024). Guerra entre Israel y Gaza, en directo | EE UU se dice “prudentemente optimista” sobre las negociaciones para un alto el fuego en Gaza . Obtenido de Diario El País: https://elpais.com/internacional/2024-07-11/guerra-entre-israel-y-gaza-en-directo.html
Europapress. (19 de junio de 2024). El Ejército de Israel dice haber aprobado un plan de ataque contra Líbano ante la escalada con Hezbolá . Obtenido de Europapress Internacional: https://www.europapress.es/internacional/noticia-ejercito-israel-dice-haber-aprobado-plan-ataque-contra-libano-escalada-hezbola-20240619032843.html
IDF. (julio de 2024). Obtenido de The Israel Defense Forces: https://www.idf.il/
Infobae. (03 de julio de 2024). Hezbolá lanza cien cohetes contra varias bases israelíes tras la muerte de uno de sus altos mandos . Obtenido de Infobae: https://www.infobae.com/america/agencias/2024/07/03/hezbola-lanza-cien-cohetes-contra-varias-bases-israelies-tras-la-muerte-de-uno-de-sus-altos-mandos/
Izso, L., & Alkhshali, H. (07 de julio de 2024). La Policía israelí detiene a 2 manifestantes en una protesta antigubernamental en Tel Aviv . Obtenido de CNN: https://cnnespanol.cnn.com/2024/07/07/policia-israel-manfiestantes-protesta-antigubernamental-tel-aviv-trax/
Jones, S. G., Byman, D., Palmer, A., & McCabe, R. (21 de marzo de 2024). The Coming Conflict with Hezbollah . Obtenido de Center for Strategic and International Studies – CSIS: https://www.csis.org/analysis/coming-conflict-hezbollah
Mroue, B. (17 de mayo de 2024). Hezbollah introduces new weapons and tactics against Israel as war in Gaza drags on . Obtenido de AP news: https://apnews.com/article/lebanon-israel-hezbollah-hamas-gaza-drone-missiles-cd9f59ffa7f876aa755b3c6612246763
Padinger, G. (15 de marzo de 2024). Siria, la guerra sin fin que cumple 13 años sin perspectivas de paz: ¿cómo se inició este conflicto? Obtenido de CNN: https://cnnespanol.cnn.com/2024/03/15/siria-guerra-11-anos-orix/
[1] Esta resolución exige un cese total de las hostilidades entre Israel y Hezbolá, la retirada de las fuerzas israelíes del Líbano para ser reemplazadas por fuerzas libanesas y de la UNIFIL desplegándose en el sur del Líbano, y el desarme de grupos armados incluyendo Hezbolá.
[2] Localidad del sur del Líbano, próximo a la frontera con Israel